Origen

Se nos olvida, a menudo, que la felicidad también regresa.

Transformada en persona, lugar, momento.
La reconocerás porque mientras dure, sea un instante o una docena de meses, no serás consciente de lo único imbatible: el tiempo.
Tampoco te importará si es domingo o viernes, si luce el sol o está lloviendo:
los días perderán su nombre, siempre habrá luz.
¿Y qué diferencia habrá entre la noche y la mañana? Apenas el color del cielo.
Abandonarás la palabra nostalgia en cualquier calle.
Dejarás de hacer viajes al pasado escuchando aquella canción.
No habrá espacio en tu almohada para los recuerdos.

Se nos olvida, a veces, que la felicidad también vuelve.
Solo hay que esperarla apoyada en la puerta.
Déjala que pase.
Y que ella sea lo único que pase.

Publicado por

leticiatriguerosblog

Profesora, Periodista, Palabrera. Por efecto y por defecto. En ese orden o en otro cualquiera. Lo demás lo descubrirás en mis letras...o en mis retales.

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